Aprender a leer partituras, afinar el oído, perfeccionar técnicas para tocar un instrumento o proyectar la voz correctamente, son algunas de las habilidades que deben aprenderse para convertirse en un músico profesional. Para lograrlo, la práctica, el trabajo en equipo y la visión de esta profesión, se necesitan nuevas experiencias que en la Universidad El Bosque se pueden vivir desde los primeros semestres.
Para el maestro Javier Pérez Sandoval, Director del Programa de Formación Musical, construir conocimiento es una tarea que se desarrolla en equipo, integrando la teoría, ambientes reales para practicar, escenarios donde los estudiantes puedan conocer los retos de su carrera y en los que puedan compartir con futuros músicos profesionales de otros semestres.
La Big Band, el Proyecto Sinfónico y el componente de Músicas Colombianas son tres de las diversas iniciativas en las que estudiantes de diferentes semestres y en algunas oportunidades de otras carreras, pueden interactuar con profesores, egresados e invitados colombianos e internacionales con quienes pueden ensayar y tocar en el mismo escenario.
Los estudiantes de ingeniería de sonido también son parte del proceso, pues graban y ayudan a estructurar la forma en que sonarán formalmente los diferentes proyectos de la Universidad. Se trata de una experiencia real en la que los estudiantes aprenden a relacionarse con su entorno y con quienes lo habitan.
Por otro lado, para el maestro Sandoval es importante darle el mismo valor a todas las expresiones musicales que existen. Pensando en eso, la Universidad busca integrar lo clásico, lo popular y lo tradicional para brindar un panorama integral y universal de la música, abriendo nuevos espacios para la creatividad.