Son muchas las posturas y reacciones que han generado las nuevas medidas adoptadas por el gobierno, que buscan dar apertura paulatina a las empresas de manufactura, construcción y algunos negocios como talleres y lavanderías que cumplan con los debidos protocolos de bioseguridad; incluso en el área de la salud las opiniones también están muy divididas y desde los profesionales del área asistencial hasta epidemiólogos y salubristas se debate alrededor de este tema, sin deslegitimar los beneficios o las problemáticas que conlleva esta apertura.
Sin embargo, es importante resaltar que la contingencia sanitaria, también ha sido una oportunidad para mejorar la infraestructura hospitalaria, renovando los laboratorios de salud pública, dotando al personal con equipos de protección, adquiriendo ventiladores mecánicos y en sí, ampliando la capacidad clínica hospitalaria especialmente en Unidades de Cuidado Intensivos e Intermedio.
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Por eso, la Directora del Doctorado en Salud Pública de la Universidad El Bosque, hace hincapié en la necesidad de que las empresas hagan un estricto cumplimiento a las normativas de seguridad dictadas por el Gobierno Nacional y sus propios protocolos de bioseguridad para el retorno al trabajo, avalados por la entidad territorial correspondiente. En estos, también deberían reiterarse las medidas de prevención y las garantías de zonas seguras de trabajo en donde exista el distanciamiento social. Así mismo, se debe garantizar a los trabajadores el suministro de implementos como tapabocas, guantes, gel antibacterial, jabón, y contar con lugares para lavarse las manos. Además de tener la señalización y mensajes informativos sobre la prevención de esta enfermedad.
Por otro lado, Adriana del Pilar Pacheco plantea la necesidad de incluir modelos de identificación para casos potenciales del virus, en el que se especifiquen los procedimientos a seguir y se establezca quién se encargará, cómo lo va a tratar y quién dará aviso a la EPS o ARL, entre otros. Además de garantizar toda la confidencialidad y ética, teniendo en cuenta que se manejan datos clínicos y deben ser tratados conforme a la ley de protección de datos (Habeas data).
Todos estos parámetros son relevantes para prevenir y disminuir el contagio del virus entre la población, y de igual forma promover y garantizar acciones concretas que respalden las labores del sector y el sistema de salud.