Hoy te presentamos cuatro herramientas que te permitirán tomar la opción más acertada para ti, a la hora de elegir la carrera con la que sueñas estudiar.
Algunos jóvenes corren con la suerte de saber desde mucho antes qué quieren estudiar. Pero si ese no es tu caso, no te preocupes. Seguramente no eres el único que está pasando por esa situación. No es como escoger qué zapatos voy a usar hoy o qué voy a pedir para comer en un restaurante. Se trata de una decisión que va a trascender el resto de tu vida por lo que debes asegurarte de tomar la decisión correcta. Si aún tienes dudas acerca de cuál es la mejor carrera para ti, en la Universidad El Bosque te brindamos 4 herramientas que puedes poner en práctica.
1. La pregunta fundamental: ¿Para qué soy bueno?
Aunque parece una pregunta sencilla, no lo es y es que muchas veces, la respuesta está relacionada con lo que te gusta hacer. Piensa en tu materia favorita, seguramente, además de disfrutar las clases, te iba bien y la razón es porque cuando disfrutas hacer algo, pones todo tu empeño en desarrollarlo de la mejor manera. ¿Te gusta la biología? Considera las carreras donde esta ciencia tenga un papel fundamental y haz una lista.
2. Acude a un psicólogo
Acude a un psicólogo experto en orientación vocacional. Un profesional en esta materia, te asistirá para que seas capaz de descubrir tu potencial y la forma de desarrollarlo al máximo; a través de una profesión que se acople a tu personalidad y tus destrezas. Quizá no te de la respuesta definitiva, pero sí te dará luces respecto al camino que más te conviene. Otra opción, es aprovechar los distintos test vocacionales que encuentras en la internet, hay muchos que son gratuitos y pueden ayudarte a identificar los campos en los que mejor podrás desempeñarte.
Tus profesores y familiares también pueden ser buenos consejeros. No dudes en hablar con ellos y expresarles tus inquietudes. Ten en cuenta que, en algún momento de sus vidas, pasaron por la misma situación que tú; así que sus experiencias pueden enriquecer tu decisión. Sin embargo, recuerda que no son ellos los que deben decidir por ti. Solo tú sabrás al final del día, lo que prefieres para tu futuro.
3. ¿De qué se trata lo que quiero estudiar?
Si ya tienes algunas opciones, pero aún no te decides por una sola, es hora de investigar. Afortunadamente Internet es la herramienta mágica para encontrar toda la información que necesitas. Averigua qué universidades ofrecen las carreras que estás considerando y revisa detalladamente los planes de estudios. Es posible que la ingeniería electrónica te llame la atención, pero definitivamente no te gustan las matemáticas. En ese caso, debes replantear tu decisión, o saber que deberás tomar clases extra en estas materias. Mira los cursos que se imparten desde el primer hasta el último semestre y escoge cuáles son los pensum que prefieres. Seguramente al final de este paso, tendrás más clara tu decisión.
Dato curioso: algunas universidades permiten a futuros estudiantes, ingresar como asistentes a algunas clases de la carrera que tienes en mente, así que, si tienes la oportunidad de hacerlo, no lo pienses. No solo podrás conocer algunos de los temas que se imparten, sino también, tendrás la posibilidad de hablar con estudiantes sobre sus experiencias académicas.
4. Busca referencias
Busca historias de personas que han alcanzado el éxito en las carreras que te llaman la atención o incluso, busca entrevistarte con algunas de ellas para que te cuenten el camino que han tenido que recorrer para llegar a donde están ahora. Nunca sabes, puede ser el empujón final que necesites para hacer tu elección final.
¡Ya lo sabes! Solo debes dedicar un poco de tiempo para conocer a fondo tus posibilidades. Confía en ti, en tus capacidades y de seguro, tomarás la decisión correcta.