Este ejercicio hará sentir la fuerza de la vida y aumentará la capacidad de concentración. La espalda y los hombros se descargan y se refuerza la musculatura de las piernas.
1. Flexiona ligeramente las rodillas e inclina el torso hacia delante desde las caderas.
2. Apoya los codos en las rodillas.
3. Inclina la cabeza hacia delante y déjala caer sobre los antebrazos.
4. Cierra los ojos y concéntrate en la unión entre cabeza, brazos, torso y piernas.
5. Siente la fuerza y la energía de la concentración y la focalización.
Sigue respirando con regularidad durante el ejercicio y mantén el equilibrio.